¿Cómo fortalecer la comunicación entre los padres y sus hijos con cáncer?
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...la Fundación hizo que nos diéramos cuenta que no somos los únicos, sino que somos un grupo de papás y niños atravesando esta prueba...
EL INICIO… :en febrero del 2022 nuestra hija dio positivo para COVID-19, por lo que fue aislada y monitoreada. De manera simultánea, presentó dolores de espalda, pero en ese momento no se le dio la debida importancia. Posteriormente la llevamos al pediatra quien le ordenó un TAC, el resultado mostró tres vertebras fisuradas y además generó la primera sospecha de la enfermedad que le fue diagnosticada el 30 de marzo: Leucemia Linfoblástica Aguda.
LO MÁS DIFICIL… fue verla madurar emocionalmente tan rápido, hablamos específicamente, de evidenciar como ella afrontaba el proceso mejor que nosotros como padres. Ante cada procedimiento quirúrgico ella mostró fortaleza y resiliencia. Esto le sirvió para ser escogida como apoyo pata otros niños recién diagnosticados.
También fue difícil soportar los constantes pinchazos con agujas y perder su cabello. Como madre ha sido difícil ver su dolor y solo poder contenerla, sin poder estar yo en su lugar.
EL APRENDIZAJE…aprendimos a confiar en Dios y a reír a pesar de las circunstancias. Creo firmemente que una buena actitud influye positivamente en todo. Como padres de nuestra “mona Mafe”, aprendimos que sin importar qué tan difícil sea una prueba a primera vista, todo es posible, teniendo a Dios como el eje de todo y detrás de él a nuestra familia. De esta manera, nuestra hija tiene un acompañamiento fuerte e indestructible ante cualquier circunstancia que se presente en su largo camino.
LO MÁS VALIOSO…esta situación de salud de nuestra hija fortaleció la confianza en el hogar, hizo más visible la unión familiar y también más consiente el amor infinito que existe entre nosotros. También ha sido valioso conocer a otros niños y a otras familias que como nosotros viven esta situación. La compañía de otros niños que viven lo mismo que María Fernanda hace que nos sintamos más acompañados. Ir a la Clínica es más llevadero cuando tenemos amigos con quienes conversar y con quienes poder compartir lo que nos pasa.
MI EXPERIENCIA CON LA FUNDACION… la Fundación hizo que nos diéramos cuenta que no somos los únicos, sino que somos un grupo de papás y niños atravesando esta prueba. Cuando conversé con la psicóloga Sinders tuve más esperanza acerca de la curación de mi hija. Hoy creo que mi hija se puede curar y seguir adelante con su vida, así como ocurrió con Sinders, quien sobrevivió al linfoma que le fue diagnosticado cuando era niña.
De la Fundación también he recibido bonos de mercado, servicio de transporte Uber, y diversas actividades en la hospitalización, que hacen más llevadero el tiempo de tratamiento de mi hija, porque le ayudan a pensar en otras cosas y a distraer su atención.
el mensaje es de María Fernanda para otros niños que como ella han sido diagnosticados con algún tipo de cáncer: “no se rindan, intentar las veces que sea necesario es la clave, si se puede”. No olviden hacer caso a todas las indicaciones de los médicos oncólogos. No desfallezcan y mantengan la fe intacta siempre con buena actitud, porque aunque las cosas a veces no estén bien, poco a poco van cambiando y mejorando.
- María Fernanda Serrato – 9 años y mamá Paula Gutiérrez
